Una Multitud pidió juicio y castigo para los represores de la última dictadura

Más de 25 mil personas conmemoraron, en Rosario, el 33º aniversario del golpe militar más sangriento de la historia argentina. La marcha de la Memoria por la Verdad y la Justicia, como se la denominó, se realizó el martes 24 de marzo desde la plaza San Martín, para culminar con un acto en el Monumento a la Bandera. Una multitud, junto a las Madres de Plaza 25 de Mayo, se unió en un mismo grito de justicia ya.
Juicio y castigo con cárcel común a los genocidas fue la consigna a la que adhirieron las diferentes agrupaciones presentes. “Éste es el año. La justicia tiene que estar a la altura de las circunstancias”, declaró Eduardo Toniolli, secretario general del Movimiento Evita. Por su parte, Eduardo Marinangeli, acompañante de la agrupación Madres desde hace 15 años, sostuvo que la mayoría de los jueces son “cómplices y retrasan el proceso”.
“La jueza Laura Cosidoy no puede juzgar a nadie, ya lo dijo, es amiga de Galtieri”, continuó Marinangeli en referencia a la entrevista que la magistrada dio a otro medio gráfico la semana anterior. Representantes de las demás agrupaciones coincidieron en pedir el juicio político para la jueza y la destitución inmediata de su cargo. Paula Luna, militante de la organización de derechos humanos Familiares de Desaparecidos, apuntó que el sistema Federal de Justicia está lleno de “este tipo de autoridades de la dictadura”.
Cuando la manifestación llegó a los Tribunales Federales de Rosario, los cánticos contra Laura Cosidoy se apoderaron de una multitud enardecida. También se pidió por el urgente comienzo de los juicios a represores. Luego, cuando la marcha llegó a plaza 25 de mayo, se honró a las Madres con aplausos y canciones de apoyo.
Ya en el Monumento a la Bandera, las más de 25 mil personas fueron buscando su lugar en las escalinatas para presenciar el acto central. Una de las Madres, identificada como Nelly Galasso, abrió la ceremonia y recordó las consignas de la marcha: Juicio y cárcel común para los genocidas, ya; aparición con vida de Julio López, la unificación de las causas, aceleración de los juicios y juicio político a la jueza Laura Cosidoy, entre otros pedidos.
“Hay cada vez más apoyo del pueblo”, confesó Élida López, una de las Madres presentes. Para finalizar el acto, hubo diferentes grupos musicales. Actuaron Isabel Puebla, Dúo Jano y los grupos Varón y Farolitos.

Incidentes

La marcha mostró diferentes tintes políticos desde el comienzo. Por un lado, sobre calle Córdoba, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Partido Comunista Revolucionario (PCR) representaban a agrupaciones opositoras al gobierno actual. En la calle Santa Fe, en el otro extremo de la plaza, el Movimiento Evita encabezaba otra fracción de la movilización.
Los problemas comenzaron a la hora de unificar la marcha. Madres y el grupo Hijos por la Identidad contra el Olvido y el Silencio (HIJOS) de Rosario tomaron la delantera y avanzaron. En la intersección de las calles Dorrego y Santa Fe, la agrupación peronista Evita se enfrentó a los militantes de la CCC y el PCR por la ubicación dentro de la marcha. La gresca incluyó palazos y piedras entre los miembros de las organizaciones. “Siempre pasa lo mismo, el problema es por el lugar”, explicó Carlos Lescano, perteneciente al movimiento oficialista.

JUAN DIEGO HUERGA